miércoles, 15 de agosto de 2007

"Una nueva generación para la continuidad del proyecto revolucionario"

DISCURSO ZONAL SUR EN EL 42 ANIVERSARIO DEL MOVIMIENTO DE IZQUIERDA REVOLUCIONARIA


Compañeros familiares de nuestros camaradas caídos.
Compañeros de organizaciones hermanas de lucha revolucionaria.
Compañeros militantes, simpatizantes y ayudistas.
Compañeros de los pueblos originarios.
Compañeros pobladores, trabajadores, mujeres, hombres y jóvenes presentes
Compañeros todos.


El movimiento de los trabajadores hace más de cuatro décadas, en un contexto nacional e internacional complejo, se forzaba por avanzar hacia la concreción del sujeto capaz de transformar el capitalismo y dotarse de su organización para la construcción del socialismo.

En lo particular, la crisis del modelo desarrollista, y su patrón de acumulación sustituidor de importaciones era incapaz de responder al movimiento social e incapaz de mantener la taza de ganancia, abriendo un periodo pre- revolucionario en la sociedad chilena.

En lo universal, con contradicciones seberas frente al movimiento comunista por su abandono de bolchevismo, desde la tercera internacional, como frente a la degeneración burocrática del estado soviético y su extendida política de la construcción del socialismo en un solo país. Todas políticas agrietadas solo por la efervescencia revolucionaria en el tercer mundo y especial mente la lucha extraordinaria contra el colonialismo y por la emancipación nacional de los pueblos.

Es entonces, un 15 de agosto de 1965 que un viejo grupo de luchadores, entre sindicalistas, estudiantes, pobladores y jóvenes revolucionarios se juntaron con la firme voluntad de impulsar junto al proletariado el proceso revolucionario que Chile y América Latina requiere, fusionando varia generaciones, uniendo las luchas de amplios sectores de pobre del campo y la ciudad, sacudiéndose del letargo reformista, entre ellas, una generación de jóvenes prodigiosos que desde los 60 miraba el proceso cubano como expresión más avanzada de la lucha revolucionaria, convirtiendo a este, en el arquetipo del imaginario político emancipador y punto de quiebre en la práctica política de las viejas corrientes tradicionales de la izquierda latinoamericana. Momento de síntesis de la lucha de clase, que cristalizó en el fenómeno político más relevante en le historia política de este país y por qué no decirlo, el movimiento más prometedor en el desarrollo de un verdadero poder popular, al incorporar a los excluidos y marginados de la sociedad capitalista como actores en la construcción de un proceso revolucionario de transformación social.

La historia de una organización alimentada por diversas historias personales y una variedad de corrientes y generaciones, una inflexión en la vieja y anquilosada práctica política del parlamentarismo burgués y el economicismo obrero que fue el sustrato de la colaboración de clase y que aún amarra al movimiento de los trabajadores.

Acerados en la experiencia de las luchas de los pobres del campo y la ciudad, en el desarrollo de los embriones del poder popular enfrentamos la larga noche de la persecución y el exterminio de la resistencia valiente, para poco a poco irnos desraizándonos de pueblo, perdiendo el espíritu crítico, aquel, que orgullosos recordamos frente a los tanques soviéticos en la primavera de Praga, olvidando la autocrítica y perdiendo la independencia política.

Aún así, nuevas generaciones saltaron al carro del último tren del mega relato prometeico, aquel que se nos desmoronaba frente a los corazones palpitantes de las nuevas generaciones que pugnaban por ser protagonistas, nos quedamos entre los golpes represivos de los ochenta que como siempre, cobraba la vida de lo mejor de nuestro partido.

Hoy a 42 años, la testaruda historia no termina de darnos lecciones, de la generosidad política de muchos compañeros la tinta sería insuficiente para describir, nombrarlos o contar las infinitas historias de amor, solidaridad y entrega, cinco generaciones de revolucionarios que con aciertos y errores prodigaron su vida en la construcción y desarrollo del poder del pueblo.

Pero no todo fue dignidad, como adivinando los acontecimientos nuestra organización venia desgajándose, mientras el oportunismo solapado, artero y afianzado en la política de institucionalidad legal que la salida burguesa ofrecía, había socavado el partido.

Ya en los noventa convidados al entierro de los socialismo reales, el oportunismo interno terminaba su trabajo desvirtuando la función de muchas de las organizaciones democráticas independientes, innumeras de ellas, terminarían cooptadas por la institucionalidad seudo democrática y la reinvención de un modelo político de dominación, que bajo la mercadotecnia política yanqui engañó a amplios sectores populares, en una alegría que sólo se esbozo en el rostro de la minoría de siempre que amplio sus negocios como yanacona de las grandes corporaciones transnacionales, asegurando la eufemística de la seguridad nacional, el estado policial y el modelo libremercadista neo conservador.

No tenemos la menor duda, que muchos pueden no compartir nuestra visión, pero sin lugar a dudas seremos inclaudicables en sostener que hemos carecido de la autocrítica necesaria, que hemos perdido el respeto por la discusión fraterna y constructiva, que muchos hemos terminado cerrando filas en conducta corporativas, cegándonos en emociones, claudicando muchas veces frente a los traidores, hemos cerrado los ojos frente a nuestros errores, nos hemos anquilosado frente a los desafíos de la lucha de clases.

El tiempo en que nuestra sangre fluyó prodiga en el sacrificio e inclusive en el martirio, en la gesta y en la acción internacionalista, pareciera olvido, la arteriosclerosis política nos limita, nos frena, mientras el ímpetu juvenil por la esperanza de un mundo mejor, como decía el che, se estremece por soltar las amarras de una sociedad sin futuro, rebuscando en los fantasmas del pasado el mito que se diluye entre anécdotas y leyenda de una membresía incapaz de imponer la sensatez de la humildad ante los orgullos pequeño burgueses que nos fragmenta.

Pero esta no es la noche para odiosidades dirán algunos, no... claro... tampoco para nosotros, porque la idea es avanzar y rasguñando la historia en forma crítica, aprendemos las lecciones y entendemos que la utopía política no sirve, ya no habrá jóvenes prodigios seguramente en nuestra membresía, nos cansamos de esperar el material humano idóneo para nuestra época, de hecho el viejo y vilipendiado Lenin lo dijo: “edificaremos el socialismo con esos mismo hombres que han sido educados, podridos y corrompidos por el capitalismo, pero que, precisamente por eso, han sido templados por el para el combate”, porque los procesos no solo son el producto de la evolución histórica dialéctica, sino en gran medida, su impulso consciente, son los hombres comunes quienes crean su partido y profundizan las luchas, son hombres normales que culminan un laborioso parto que permite que cambien las circunstancias para que nazcan otros hombres.

En tiempos que aún se no acusa de vanguardistas, de querer arrastrar a esa masa inerte tras nuestra acción valerosa e independiente (hasta de exaltados y trasnochados nos tratan por ahí) queremos decir, que la idea leninista de la organización presupone el hecho de la revolución, a partir exclusivamente de la actualidad de la revolución, si algún compañero tiene dudas de la actualidad de esta, en otra lugar ha de estar, porque este viejo remozado orden del capital cruje y hace agua, por lo que otras demandas y exigencias nos reclama día a día.

El modo de producción capitalista, hoy como ayer sigue siendo miseria para el pueblo pobre, opulencia y despilfarro para los patrones. Hoy como ayer los gobiernos de turno están al servicio del gran capital. Hoy como ayer hace falta una nueva generación para sumir el proyecto revolucionario.

El capitalismo actual en su forma neoliberal es aún más rapaz, los sectores más dinámicos de este modelo económico, es decir los pilares sobre los cuales se sustenta el éxito macroeconómico del que tanto les gusta hablar a los poderosos y sus yanaconas, es decir, La banca (capital monopólico financiero), el sector primario exportador, y el sector de servicios (retail) y para qué decir de las remesas de capital al exterior, son los sectores que más ganan, los que más beneficios reciben de parte de los gobiernos de turno, y los que más explotan a sus trabajadores.

La concertación ha seguido al pie de la letra su papel de administrador del modelo neoliberal. No ha dudado en legislar para los patrones, en subsidiarlos cuando sus negocios no funcionan y no ha dudado en mover las fuerzas armadas fascistas contra pescadores y el pueblo mapuche, o matar como hicieron con Rodrigo Cisternas en Arauco para defender los intereses de los poderosos.

Compañeros, esta noche tendrán que admitir que hemos reaccionado de forma comedida a esta época y su modelo, los millares de panfletos no han alcanzado a arrojar suficiente desprecio y sarcasmo sobre la hipocresía generalizada, ni han dado abasto a rebatir un cuanto hay de discursos basistas, post-históricos y posmodernistas que han contribuido a la particularismos militantes y la dispersión de la potencia organizativa de la clase.

Sin embargo pareciera que poco a poco la tendencia del reagrupamiento avanza, así diversos núcleos de revolucionarios han vuelto a articularse, desde tradiciones libertarias hasta los marxistas clásicos. Esto es un buen síntoma, la lucha de clases nos está dando la pauta, es deber nuestro avanzar en la unidad y dar saltos en niveles de organización. Saludando todos los esfuerzos que desde los espacios sociales hacen por la confluencia y por el fortalecimiento y solidaridad con todas las luchas del pueblo pobre.

Hacemos un llamado a todos quienes se sienten identificados con el proyecto mirista inconcluso, a los hombres que respiran y combaten desde la roji-negra… a la juventud generosa y vilipendiada. La potencia vendrá en la acción, fogueémonos con ellas, de novatos que somos devendremos experimentados y aquellos que no consienten en arriesgar su condición material algo privilegiada que abandone la pose, que abandonen la pelea, ya otra generación se abre paso para la continuidad del proyecto revolucionario.


¡¡Por una nueva generación para la continuidad del proyecto revolucionario!!
¡¡Ni un paso atrás, La lucha continua!!
¡¡Luchando avanza el pueblo!!


MOVIMIENTO DE IZQUIERDA REVOLUCIONARIA
Zonal Sur Agosto de 2007