miércoles, 26 de mayo de 2010

La urgencia de una revolución del trabajo

Dedicado a Dante Campana Buitrano, militante del MIR, a quien conocí en el MIR EGP-PL. Mientras otros se rendían, él en los 90 construía partido para la guerra popular. Luego nos reencontramos en los CCTT.

¿Es necesaria una revolución?: Sí, y es urgente.

Una Realidad depravada para l@s trabajadores/as, que en su mayoría somos pobladores pobres, cesantes, o marginados del trabajo y de la vida misma, es que el trabajo hoy en día sigue haciendo honor a su nombre de origen: tripalium, tres palos que se usaban para torturar y que provocaban sufrimiento o dolor.

Explotación humana, laboral, sigue siendo lo esencial del capitalismo, la producción de plusvalía su único horizonte, y en ese camino se destruye la naturaleza, se produce la pobreza, los marginados que no son otra cosa que el ejercito industrial de reserva que permite chantajear a los trabajadores activos para que acepten condiciones de explotación, bajos sueldos, largas jornadas, trabajo alienado, mecánico, bruto, so pena de quedar cesante, con deudas, y en la calle etc.

Números más números menos, la explotación capitalista no ha cambiado en su esencia, el capitalismo siempre, desde su origen tiene crisis periódicas cambia su patrón de acumulación, se metamorfosea, cambia y cambiara su forma fenomenológica, es decir su apariencia externa, mas no su esencia. No debemos confundirnos. Con casco o sin casco, con corbata, maletín y lápiz nos explotan igual. Si la clase obrera ha desaparecido, disminuido, no debería ser la principal discusión, por lo menos no lo fue y si la hubo no los detuvo en la Rusia de 1917, ni en China el 48, ni en nuestra Cuba, ni en Vietnam, etc., donde prácticamente no existían o era absolutamente minoritaria, La indignación ética, debe ser el principal motor de lucha, mientras exista un explotado; hay que luchar, creando las condiciones materiales, políticas e ideológicas, etc. para nuestra liberación, el proceso es dialéctico los explotados se rebelan el poder de los ricos se tambalea, debemos construir la esperanza.

Algunos creen que es cuestión de estudios, Sin duda el estudio de la realidad a través del método materialista dialéctico, tan dejado de lado, debe ser tarea permanente, puede ser enriquecido con el estudio de la lógica, del método de redacción científico tradicional, (Marx, Engel, Lenin, Mao, Eli Gortari, Kosík, Sánchez Vásquez, Rojas Soriano, Carlos Pérez Soto, etc.) esto nos debe permitir acerar y precisar nuestros conceptos, pero nuestra principal tarea es construir poder popular de los explotados. Carlos Enrique ya lo dijo "el arma de la Crítica jamás superara la Crítica de las armas". (Basta leer la guerra civil en Francia, la comuna), salvo el poder todo es ilusión, o como dijo Clausewitz, que la guerra es la continuación de la política por otros medios, y si precisamos e invertimos su apreciación nos encontramos con que la política actual es la continuación de la guerra de la dictadura militar por otros medios, en este caso la guerra de clases de los patrones contra los trabajadores y todas las otras facciones de clase, capas, etnias, y etc. Amén.

Muchos creen que ya no hay obreros, que hoy hay que preocuparse de los marginados, de los discriminados, etc.- todas las formas de discriminación tienen por objeto justificar, y permitir la apropiación del trabajo humano, la expoliación de los recursos, como la tierra (para ponerla en el circuito de producción (apropiación) capitalista) al pueblo mapuche, es para quitarles su medio de vida independiente y transformarlos en proletarios con pega o sin pega y poder apropiarse de su trabajo a través de la explotación capitalista. Y el destruir su cultura es para eliminar sus resistencias culturales a la explotación capitalista, a lo más para preservarlos como folklore, siempre y cuando sean dóciles y funcionales.

La revolución del mundo del trabajo es la única que permite devolverle su dignidad al hombre y mujer. La abolición del trabajo alienado, fruto de la revolución. Con la consiguiente recuperación, expropiación de las empresas, de los medios de producción, que nos son otra cosa que los medios de la vida o la muerte en vida de millones de chilen@s, La construcción de un socialismo revolucionario democrático y participativo debe ser nuestra tarea.

Por eso la urgencia de un partido revolucionario de los explotados, que convoque a los mejores hijos del pueblo, honestos, desinteresados, con coraje, valentía, profesionales (en el sentido de las capacidades) voluntarios de la revolución, sin pensiones, El MIR no fue ni será jamás una empresa.

En el aspecto organizativo en el mundo del trabajo debemos construir una forma de organización simple, con un nombre simple. SINDICATO o (CONSEJO) NACIONAL DE TRABAJADORES DE CHILE.- parece un nombre demasiado institucional, pero el concepto es el siguiente que ingresen afiliándose los cesantes, trabajadores con o sin sindicatos, con o sin patrón, también que ingresen sindicatos, todos, todos, toditos, etc. Lo que debe definirlo y darle identidad es su clara posición anticapitalista y socialista, se pueden rescatar puntos de la declaración de principios de la Central Única de Trabajadores de 1953, escritos por Luis Vitale, apoyado por Clotario Blest. Que rescate elementos de los colectivos, intentos de autogestión (los que en realidad se autogestionan, no los que viven dependiendo de la mendicidad internacional (donde hay que poner orden…y mandar a parar…) o del gobierno), que se organice por comuna, al interior pueden construirse equipos de trabajo por rubro.- por ahí … hay que romper el cerco los revolucionarios están al margen de los luchitas de los explotados, empezando por parar pequeñas casas de trabajadores y del pueblo, para empezar a juntarse, a conocerse, a reclutar para la revolución, para el socialismo, para la dignidad.

Todo esto será vano e inútil si el pueblo en todas sus denominaciones no se dota de una herramienta, un instrumento de liberación que no es otra cosa que el partido de la revolución chilena, único instrumento que permite enfrentar con éxito a los enemigos de clase: los empresarios y sus secuaces las ffaa, políticos, vendidos, trásfugas.

El MIR debe dotarse de estrategia, de un programa, de una plataforma de lucha, en fin de una teoría, en el cual “al comienzo de nuestra lucha y reflexión creadora se formulará una rica concepción del mundo, cuyos problemas y motivos fundamentales no serán abandonados o superados, sino precisados, desarrollados y formulados exactamente sobre la base del estudio y de la práctica.” Como creemos se intentó por los representantes de los diversos movimientos políticos de los 50 y 60 que dieron origen al MIR en 1965.

Por eso la urgencia del MIR, para la guerra contra el capital.

SOLO LA LUCHA POR LA REVOLUCION NOS HARA LIBRES.

Militante, cesante de extracción obrero campesino, pobre, que vive en una población.
Otoño en el Sur.